viernes, 20 de enero de 2012

Camas hinchables, túnicas y dagas voladoras

La madrugada es la peor hora para ver televisión (a menos que sea de pago). Esa franja horaria está en disputa entre videntes, pornochachas, pornoprofesoras, pornosecretarias y hasta pornopanaderas, y en último lugar están los vendemotos. El programa se llama comúnmente "teletienda". ¿Por qué? Porque venden cosas y lo dan por la tele, no tiene más.


No sé qué le pasa a esa gente por la cabeza a la hora de inventar productos. Porque no creas que te van a vender una cosa normalita. Tú pones la teletienda y no te venden camas normales, teles normales, cuchillos normales... No. Te venden camas subnormales, teles subnormales y cuchillos que son la polla, la repolla y la recontrapolla. Cortan piñas en el aire, como si fueras un samurai. ¿Qué necesidad tienes tú de cortar una piña en el aire? Bueno, pues la misma que tienes de vestirte de pingüino y ponerte a hacer los baños. Es sólo para hacerlo más vistoso. Hay un invento que lleva tiempo circulando por internet. Lo llaman "batamanta". La mente maravillosa que "inventó" esa prenda no tuvo más que coger una biblia con dibujitos y fijarse. Le ha robado la patente al inventor de la túnica. Puestos a inventar yo voy a coger una moto y voy a decir que he inventado la bicicleta a motor. También han inventado un sujetador que por lo visto es mucho mejor que los sujetadores actuales. Debe ser que la que venía del futuro con la lejía se puso a hacer la colada ya que estaba y se dejó el sostén. Bien, pues ese otro invento no es más que una camiseta de licra. No tiene más historia.


Hay otro invento diseñado para el ocio. Consiste en... La mitad de un patín convencional, es decir, dos ruedas que se ponen en los talones. Cojonudo si quieres caerte de espaldas y abrirte la cabeza por cuatro sitios. Y para poner la guinda tienen otro producto estrella. Una pulsera antirronquidos. Yo habría diseñado una mordaza antirronquidos, pero eso yo, que sé que la boca no está al final del brazo. ¿Cómo funciona? Pues por lo visto son unas pulseras rallando lo mágico que cuando vayas a dormir te la colocas, y por un sistema de reconocimiento de voz (supongo) cada vez que roncas te mete un calambrazo. Ellos dicen que lleva dos electrodos que envían una suave señal eléctrica, pero no pone el voltaje. De esto que estás durmiendo con tu marido y a la mañana siguiente te despiertas abrazada a un churrasco humeante.

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